Partes de un Cometa Espacial: ¿Sabes cómo están hechos?

Los cometas han sido siempre un misterio para la humanidad, al menos hasta el año 1606, el momento en que se creó el primer telescopio y pudimos empezar a estudiar la verdadera naturaleza de los cometas y así saber las partes de un cometa.

Pero, antes de ese punto, podía significar cualquier cosa. Pasando por diferentes épocas y culturas, los cometas espaciales y otros visitantes del espacio profundo, fueron sinónimo de catástrofes naturales, el presagio de un evento importante, señales de la ira de los dioses, etc. El punto es que muchas culturas le dieron significados diferentes a este elemento cósmico.

Pero, para comenzar a estudiarlos y entender su naturaleza, primero tenemos que entender qué es un cometa.


¿Qué tanto sabes sobre las galaxias que conforman nuestro universo? No te pierdas nuestro artículo donde te contamos cuántos Tipos de Galaxias Existen en Nuestro Universo


¿Qué es un cometa?

Un cometa espacial es un cuerpo celeste, muy común en nuestro sistema solar y en prácticamente cualquier otro sistema planetario parecido al nuestro.

Los cometas son cuerpos celestes que orbitan en torno a las estrellas, como los planetas, asteroides y planetoides. Son objetos sólidos, formados por composiciones variadas de hielo, rocas y polvo espacial.

El movimiento de los cometas en el sistema solar describe una trayectoria parabólica muy excéntrica, es decir que su movimiento orbital en torno a la estrella puede abrirse o cerrarse mucho dependiendo de las fuerzas gravitatorias de otros cuerpos celestes más grandes que influyan en ellos.

Debido a su trayectoria amplia, los cometas pueden acercarse muchísimo a la superficie solar, cambiando su composición física al sublimarse su materia. Esto quiere decir que el hielo o los minerales de su núcleo cambian de estado sólido a estado gaseoso sin pasar por estado líquido.

El rasgo distintivo más importante de los cometas es su cola, que se forma debido al azote de los vientos solares, que desplaza la materia gaseosa circundante al cometa, creando una estela que le sigue en todo su recorrido y que puede ser apreciable a simple vista.

El astrónomo Edmund Halley fue el primer científico en proponer, en el siglo XVIII, que los cometas no se desplazan libremente por el espacio, sino que tienen una órbita definida y por lo tanto se pueden apreciar cada cierto tiempo desde la tierra.

De hecho, en 1705 pronosticó la aparición de un cometa en 1758. Su pronóstico fue cierto y aq

uel cometa hoy en día es el conocido Cometa Halley. Tristemente, Edmund no estuvo vivo para ver cumplida su teoría.

Los cometas son cuerpos celestes mucho más complejos de lo que puedes estar pensando, pues no todos son simples piedras que vagan por el espacio.

Saber cómo están compuestos los cometas es un tema interesante, además de un campo de investigación muy importante en la astronomía moderna.

¿Cuáles son las partes de un cometa?

partes de un cometa

Como te hemos mencionado, los telescopios nos han permitido dar una mirada mucho más de cerca a los cometas espaciales y debido a eso, hemos podido conocerlos mucho mejor e identificar la forma en la que están compuestos.

Cualquier cometa espacial está conformado esencialmente por tres partes: el núcleo, la coma y la cola; esta última, a su vez se divide en dos partes diferentes: cola de polvo y cola de gas. 

Veamos en qué consiste cada una de las partes de un cometa

Núcleo

El núcleo es el centro de los cometas y este concentra la mayor parte de la materia que lo conforma. La composición del núcleo de un cometa puede variar de uno a otro, pero en general se podría describir como una “piedra gigante de hielo”.

Sin embargo, la composición interna del hielo si es muy variada, por lo general están hechos de una combinación de agua congelada, metano, hierro, sodio, magnesio, silicato y otros minerales de alta volatilidad.

El tamaño de los cometas se mide tomando como referencia el diámetro de su núcleo (no el largo de su cola, como algunos creen). Existen cometas de todas las formas y tamaños, pero en la escala conocida, estas rocas pueden medir entre 1 y 150 km de diámetro.

Coma

La coma es otra de las partes de los cometas y se refiere al halo gaseoso que rodea el núcleo. Este puede agrandarse o achicarse de acuerdo a la cercanía del cometa con el sol, lo que produce que mucha de su masa se sublime y se convierta en una nube de gas conformada por diferentes elementos.

La coma rodea en todo momento al núcleo durante la trayectoria del cometa, sin embargo, al encontrarse con las corrientes de vientos solares, estos empujan los gases hacia la parte posterior, lo que crea la larga estela de polvo y gases que nosotros conocemos como “la cola del cometa”.

Cola

La cola es la parte más característica de los cometas, su rastro en forma de parábola es lo que permite que podamos diferenciarlos de otros cuerpos celestes a simple vista en la noche (inclusive en el día cuando son muy brillantes), y también fue, sin duda, el rasgo que llamó la atención de nuestros antepasados la ver los cometas pasar.

cometa

Lo curioso es que los cometas realmente poseen dos colas o, por lo menos, una cola formada por dos segmentos diferentes. En algunas oportunidades ambas se alinean en la misma dirección, en otros momentos pueden tener orientaciones diferentes, lo que permite identificarlas mucho más fácil.

La primera parte, es decir, la cola de polvo está compuesta por los residuos de polvo empujados en el desplazamiento por los vientos solares.

La segunda cola se conoce como cola de Iones. La componen gases residuales con partículas ionizadas, que son producto de la sublimación de los componentes sólidos del núcleo al acercarse demasiado al sol.

Por lo tanto, cuando los cometas están pasando por la parte más cercana a la órbita del sol en su trayectoria, este perderá parte de su materia como producto del calentamiento de los materiales congelados, haciendo que la cola o las colas (en caso de que tenga dos) deje una estela mucho más larga.

En algunos casos de cometas grandes, la cola puede alcanzar una longitud realmente enorme. 

Por ejemplo, el cometa West fue Cometa Gigante, avistado en el año 1976. Su magnitud era tanta, que dejó una estela de 29 millones de kilómetros de longitud al pasar a través de nuestro sistema solar. 

La dirección de la cola

Es normal creer que la cola de los cometas está orientada en dirección opuesta a la de su desplazamiento, porque es lo que sucedería dentro de nuestra atmósfera. 

Sin embargo, no es tan sencillo. En primer lugar, la cola de los cometas de gases ionizados asume su orientación de acuerdo a la posición del cometa con respecto al sol. Esta siempre estará a favor de la dirección en que soplen los vientos solares.

Por otro lado, la cola de polvo sí obedece a la inercia del movimiento, alineándose en algún punto intermedio entre la dirección contraria al desplazamiento del núcleo y la cola de gases.

Clasificación de los cometas

Te hemos comentado que los cometas pueden diferir mucho entre sí de acuerdo a su tamaño. Los hay relativamente pequeños y otros verdaderamente descomunales, que podrían acabar con toda la vida en la nuestro planeta si llegaran a hacer un impacto directo.

1 – 1.5 Km – Cometa Enano

1.5 – 3 Km – Cometa Pequeño

3 – 6 Km – Cometa Mediano

6 – 10 Km – Cometa Grande

10 – 50 Km – Cometa Gigante

+50 Km – Goliat.

¿De dónde vienen los cometas espaciales?

cometas espaciales

Los cometas de periodos cortos se formaron en el cinturón de Kuiper, en las afueras de nuestro sistema solar.

Nuestra galaxia tiene su propio surtidor de cometas, asteroides y otros objetos cósmicos, que en la astronomía se les conoce “Objetos transneptunianos”, es decir, materia que se origina más allá de los límites de nuestro sistema solar.

En el caso de los cometas, los que ingresan a nuestro sistema planetario suelen originarse en dos puntos diferentes.

Nube de Oort

El primero de ellos es la Nube de Oort, una formación esférica de materia que se ubica a tan solo un año luz de nuestro sol. 

Se cree que esta nube gigante de materia puede medir hasta 50.000 Unidades Astronómicas, tiene forma esférica y está formada por una acumulación masiva de materia cósmica, principalmente rocas de hielo, metano, monóxido de carbono y amoníaco

Se cree que es en la Nube de Oort donde se originan los cometas de periodos largos, es decir, los cometas que tienen trayectorias tan abiertas, que pueden tardar miles de años en completar una sola vuelta a su propia órbita.

Un ejemplo claro es el famoso cometa Hale-Bopp, que tuvo su paso relativamente cerca de nuestro sol en el año 1997 y creó un espectáculo sin igual por su increíble brillo y su larga cola.

Hale-Bopp tardará unos 3200 años en completar su órbita y poder ser visto de nuevo cerca de nuestro sistema solar.

Un dato curioso es que este cometa súper brillante creó un revuelo enorme en personas de todo el mundo. Algunos tomándolo incluso como una señal sobrenatural. 

Durante su avistamiento en 1997, los miembros de la secta Heaven´s Gate cometieron un suicidio colectivo, alegando de que abandonarían sus cuerpos para poder viajar al cosmos a bordo del cometa.

Cinturón de Kuiper

El cinturón de Kuiper es un disco de formado por materia interestelar que orbita alrededor de nuestro sol, justo después de los límites de nuestro sistema solar, por eso, su materia está catalogada como Objetos transneptunianos. 

Se cree que el cinturón de Kuiper es el lugar de origen de todos los cometas espaciales de periodos cortos, es decir, los que tienen trayectorias orbitales poco excéntricas y tardan muy poco tiempo en completar un ciclo de trayectoria.

La NASA envió una sonda espacial en el año 2006 para explorar los objetos del cinturón de Kiuper (KBO). La sonda alcanzó a plutón en el año 2015 y se espera que próximamente pueda estar suficientemente cerca del del disco que rodea el sistema solar como para dar información exacta sobre la cantidad y tipo de materia que contiene.

Probablemente el elemento de periodo corto más popular es el famoso cometa Halley, descubierto en 1705 y que completa un ciclo de su trayectoria cada 76 años.

El cometa Halley ha sido una verdadera joya de la astronomía desde hace un par de siglos porque su estudio ha aportado grandes luces a nuestro conocimiento sobre los objetos celestes. 

Un dato curioso es que, a pesar de que Edmund Halley, “descubrió” su cometa en 1705, luego se descubrió que este había sido observado gran cantidad de veces desde el año 266A.C por chinos y griegos. De hecho, para muchas culturas era un presagio sobre guerras o enfermedades.

El cometa Halley para los griegos

Halley fue un desastre completo para los griegos en el año 466 A.C, por lo que sin duda la aparición de cuerpos celestes sobre la tierra comenzó a interpretarse como una señal de catástrofe.

En esa oportunidad, la cola pasó justo por encima de nuestro planeta, lo que resultó en una lluvia de meteoritos constantes durante más de 3 meses. 

Muchos griegos, incluido Aristóteles trataron de reflexionar y buscar explicación a este tema, que sería resuelto casi dos milenios después gracias a Galileo.

¿Cuándo pasa el cometa Halley?

El cometa Halley es uno de los cometas de periodos cortos, lo que quiere decir que puede ser avistado “frecuentemente” cercano a la órbita de nuestro sol. En el caso de Halley en particular, es visible desde La Tierra cada 75-76 años.

La última vez que Halley nos visitó fue en el año 1986 y los astrónomos han predicho que su próximo avistamiento será en el año 2062.

La muerte de los cometas

muertes de los cometas

Cuando a un cometa se le agotan los gases volátiles, muere. De ahora en adelante será un asteroide.

Nada en el universo vive de manera perenne, no lo hacen los planetas, ni las estrellas… y tampoco lo hacen los cometas espaciales.

La vida de los cometas espaciales depende de la pérdida de materia al acercarse a las atmósferas estelares calientes. Este proceso hace que los compuestos minerales sólidos del núcleo del cometa comiencen a sublimarse, conviriendose en nubes de gases que posteriormente pasarán a conformar su cola de iones.

Sin embargo, los cometas no tienen ningún medio para recuperar la pérdida de materia, por lo que se van haciendo más y más pequeños con cada ciclo de su trayectoria.

Cuando los cometas son viejos y han completado varios ciclos de su propia órbita, estos perderán suficiente materia como para quedarse sin elementos volátiles, como el gas metano. En ese punto, los cometas como lo conocemos van a morir y pasarán a ser simples asteroides, una roca que flota muerta en el espacio.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Actualidad Blog
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.